¡Me tacharan de loco! Desquiciado. Torpe. Inútil. Dirán que no sé escribir y que atento contra el idioma porque muchas veces lo hago ¡Lo admito! Aunque el libró está como debe estar, y está situado como quise que lo estuviese. No fue un error de tipografía ni culpa del editorial. Cada gesto y acción, "desfachatez" y "estropeo" del idioma fue intencional. Siempre digo que si ocasiono algún tipo de sensación en el lector(a), habré logrado mi objetivo. Qué importa que sea: ira. Desprecio. Alegría. Conmoción. Repulsión o cualquier emoción que pueda emanar de usted ¿Trip, trip, trip? No puedo negar que siempre intento escribir correctamente y como se debe. Llevar cada parte como se supone que debe ir y respetando las reglas de la Real Academia Española pero, ¿Cómo seguir las reglas de una academia que día a día está en modificación con el mundo y con ella misma? Haiga, murciégalo, sastra, quis y otros quiz. ¿Murciégalo? Tanto me reprendió mi profesora de español cuando cursaba mi básica primaria, para que estos locos vengan a aceptar la palabra justamente unos años después. ¡Tranquilos! La Real Academia Española hace un buen trabajo. Tiene expertos y estudiosos en la materia y todo lo que hacen tienen un fundamento. Pero, no por esto deberíamos dejar de escribir. Escribir mal hace parte del proceso de aprender a caminar -"No aprendes, si no te caes un par de veces"- y del proceso de ser escritor o desear serlo. Por eso, querido(a) amigo(a), ¿Puedo decirle amigo(a)? O ¿Le molesta, el querido(a)? Solo escribe. Escribe y aprecia el camino de la escritura. Sus enseñanzas, sus lecciones, sus tonos y desvíos. Pregúntese ¿Por qué cometí dichos errores? Y ¿Qué habré querido compartir con usted al hacerlos? Después, disfrute nuevamente de ellos, compártalos, declámelos, o bótelo en el inmenso mundo de su mente.
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-Cuidado, no es mala persona. Pero no sabe amar -fue esa su advertencia pero me deje llevar por el color tan raro de sus ojos.
Cada palabra que decía la guardaba en una bóveda.
No fue la única advertencia que me dieron pero igual caí por el.
Ahora yo les doy una advertencia a ustedes, no nos crean. Jugamos y no nos arrepentimos del resultado. Siempre jugamos, Pero nunca nos amamos ni llegamos a enamorarnos.
A mí, me lo advirtieron muchas veces, el no sabe amar. y su forma de amar es como la de una bestia como la del mismísimo Diablo. hará arder en llamas a quien dañe tu integridad antes que él mismo la dañe. Dañará cada parte de ti de principio a fin. Y cuidado te corrompes con el y si lo llegas a hacer ten cuidado. Podrías terminar en la misma habitación que el diablo. Y yo se lo digo a ustedes. No le crean, no lo hagan.
Biología: El legado del diablo.
Libro 2: La venganza del diablo.
⚠️ Lenguaje explícito, tratos de violencia, abusos de todo tipo.
No trato de hacer ver nada de esto como bueno, leen bajo su propia convicción.
No sé acepta copia o adaptación de ningún tipo.