Si es que a veces todo lo que creíste que nunca podría tener lugar en tu vida, te envuelve y no te has dado cuenta del cambio, y sin embargo sigues pensando que ese chico nunca se fijará en ti.
Tu misma te das cuenta que eres igual de culpable que el resto de hipócritas a los que tanto odias, y es cuando tu vida o tú, aún no lo sé, cambia, como si tu vida y tú siempre hubierais sido así, y se asumen las diferencias de la vida anterior y esta con absoluta normalidad.
Se proyecta un corto en el subconsciente, y es que ¿Que tendrán los otoños y los inviernos? ¿Que tendrá la fecha de mi cumpleaños? Que siempre llevó conmigo la tormenta, que mi carácter es inmutable ¿Que pasaría en aquellas épocas? que yo vivía sonámbula en un mundo aparentemente estático en el que pasaban los días y los gobiernos, y se acrecentaba el efecto invernadero, y yo seguía igual, mirando por aquella ventana de la habitación de hotel, en un viaje a no se donde, era una ventana cerrada.
Andy siente que todo le sale mal: acaba de ser rechazado por la chica que le gusta y necesita ayuda urgente para aprobar sus exámenes o tendrá que recursar en las vacaciones de invierno. Para colmo, su madre le consigue el peor tutor de todos: Edward, el chico más grosero, antipático y con fama de ser homofóbico. El escenario no podría ser peor.
Sin embargo, con cada tutoría, descubre que Edward es todo lo contrario: es amable, divertido y está secretamente enamorado de otro chico de la escuela.
Andy, al descubrir que Edward no es lo que todos piensan, decide ayudarlo con consejos de conquista a cambio de las tutorías, no obstante, a medida que pasa el tiempo, la relación entre ambos se fortalece. Mientras Edward sigue los consejos de Andy y parece que está conquistando al chico que le gusta según sus propias palabras, Andy comienza a cuestionar sus propios sentimientos.
¿Podrán conseguir la conquista perfecta o descubrirán que el amor verdadero está más cerca de lo que imaginaban?