Dicen que ningún soñador es demasiado grande y ningún sueño es pequeño... En mi caso... Mís demonios son inestables, tan inestables qué tengo miedo de no saber qué hacer con ellos. Me llamó Sarah Michelle. Una chica qué le gusta los helados y gustó por la fotografía; mí idea en la vida, es viajar por todo el mundo y llegar a la India para no jamás irme. Pero no contaba con qué él...dios! Él aquel jodido hombre de ojos verdes, cabelló castaño claro, y mirada sexy, fuese a estropear todo lo qué yo he construido. Ahora no sólo debo soportar su falto de tacto hacía conmigo, y suele reírse de mí tragedia emocional, y mí falta de ser cuidadosa y torpemente para no caerme, ha sido uno de sus puntos favoritos a su favor de él. ¿Es posible dejar de lado todo, para conocer su verdadera personalidad?
***.***A mí me cuesta ser cariñoso, inclusive en la vida amorosa. Siempre doy menos de lo que tengo. Mi estilo de querer es ése, un poco reticente, reservado el máximo sólo para las grandes ocasiones. Todo estaba bien casi bien por que el hecho de estar comprometido me quedaba sin opciones para eludir ese infeliz contrato. A si que alguien me propuso hacerle un pequeño juego a esta chica, y que chica...rara, sencilla y honesta...
Al principio de la apuesta todo era juego con el pasar de los días, las semanas .a fui encariñandome con ella. Y sin darme cuenta me enamoré de ella.**
Kim nunca pensó que mentir en su currículum la llevaría a una completa travesía con su joven jefe.
Nico nunca pensó que darle una oportunidad a Kim la convertiría en el amor de su vida.