Hay momentos, que creemos marcarán nuestra vida; nos despertamos, abrimos los ojos y nos decimos a nosotros mismos "¡Éste será un día especial, hoy sucederá!", pero aquello que tanto ansiábamos, se torna en un día cualquiera, uno que puede ser olvidado fácilmente con el paso de los años.
Sin embargo, hay días que simplemente vuelven trizas todo nuestro equilibrio, nuestro entorno, días que... nos obligan a cambiar.
¿Cuántas veces hemos encontrado esa pieza que, sin saberlo, hemos buscado por tanto tiempo?
Lo que uno considera tragedia un día, puede convertirse en el mejor suceso que pudo haberle ocurrido.
En el caso de Suran, no es diferente.
Elliot Jensen and Elliot Fintry have a lot in common. They share the same name, the same house, the same school, oh and they hate each other but, as they will quickly learn, there is a fine line between love and hate.