Cassandra y Christopher tienen vidas completamente diferentes, pero hay algo que si es igual... a ambos les rompieron el corazón. Dicen que todas las historias de amor inician de una manera muy hermosa, pero la historia de Cassie y Chris no inicio así. Una chica vestida de novia en un elevador llorando y con el maquillaje corrido y él un simple repartidor de pizza llegando ocho minutos después del tiempo de entrega, ahora la pizza, era gratis...