Me miran como si fuera de otro planeta, observan con detalle cada uno de mis pliegues resecos de tanto polvo en cada error cometido. Les causa admiración mis mil historias transcurridas y tantas escondidas bajo mis pupilas, jamás contadas, pero sí comentadas y ciertamente vividas. Arrastro tras de mí millones de estrellas desvaneciéndose e intentando brillar con cada frase de aliento regalada a los débiles, cuán debilitada estoy. Mil corazones salvados de la oscura soledad, del miedo a perder, tantos consejos escuchados tan pocos comprendidos. Pienso y quisiera muchas veces recuperar la inocencia, la pureza de mis ojos jóvenes, el brillo de mi piel adolescente, mantenerme en pie tras cada caída... Pero por sobre todo quisiera recuperar el aliento para respirarlo contigo y poder tener el valor de seguir dando aliento a los débiles, seguir salvando corazones solitarios, seguir aconsejado. De seguir lo que un día inconcluso dejé. Flavia Paz M. 19-03-2015All Rights Reserved
1 part