No siempre conocemos lo que creemos conocer. Quizá ni siquiera a nosotros mismos. Más te vale comenzar a escudriñarte cuanto antes... si no quieres que ocurra una desgracia.
Tal vez no sea la mejor historia, pero no se como llegamos a esto, no se en que momento decidí empezar a fastidiar tu vida, no se en que momento empezaste a cruzarte por mi cabeza siempre, no se en que momento las bromas pesadas empezaron a cambiar por conversaciones largas y soluciones de problemas, ni tampoco se como... te empecé a amar