Una pregunta. Una pregunta fue lo que bastó para poder tener entre mis manos el mismo cielo. "-¿Puedo preguntarte algo?--Asentí lentamente, después de lo que acababa de pasar no creía que algo pudiera ir peor.-¿A qué se refieren con polla?- Y juro en este instante, que sino hubiera sido por su maldita expresión angelicalmente erótica, me habría echado a reír."