Lily había querido irse de su casa desde que tenia memoria. Su padre le había puesto una sola condición; tener una carrera universitaria. Pero ella quería irse las pronto posible. Y entonces la Academia Riverside apareció. Se iría a un internado. Y lo mejor de la situación eran que los dormitorios eran separados por género. Lo cual para una lesbiana era él paraíso. Sin embargo nunca se llegó a imaginar que en su pequeño paraíso llegaría Nathan, la piedra en el zapato de Lily durante toda su estancia en la academia. Nathan estaba dispuesto a hacerla cambiar de opinión respecto a su gusto por los hombres, y llegará a ser tan convincente que hará dudar seriamente a Lily sobre su sexualidad.