Llego tras una jornada dura de trabajo y solo me apete una ducha y tumbarme. Me desnudo doy al agua de la ducha y el chorro de agua comienza a deslizarse por mi cabeza, mis hombros, mi pecho y espalda y voy notando como la calidez del agua va surcando y acariciando mi culo, mi pene y chorrea por mis testiculos. La sensación es muy agradable y relajante. Mientras me mojo todo el cuerpo frotàndome con las manos cierro los ojos dejando volar mi pensamiento y mi mano acaricia mi sexo. Me viene la imagen de ella, que durmiendo desnuda me aguarda en el lecho. Es inevitable que me empiece a excitar pensando en su cuerpo. Acabo la ducha y me seco, no sin antes de en el momento de sacarme mi pecho y hacer lo mismo en mi sexo que está predispuesto y caliente. Me dirijo a la nevera desnudo y bebo un poco de leche fria. Me entra curiosidad por verla y con el cartón de leche me dirijo a la puerta de la habitación. Oscura pero gracias a la luz del pasillo puedo distinguir su bella silueta sobreAll Rights Reserved
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