Esta es una historia basada en hechos reales.
Es sobre una joven chica llamada Danielle de 13 años que nunca le gustó ser sociable, esto era porque se mudaba muy seguido y ya no quería decir adiós una y otra vez.
Ya era su séptima mudanza, se prometió no salir a socializar nunca más, pero, no lo logró. Después de un año de escusas ya no aguantaba que sus vecinos la fueran a buscar, así que decidió salir, ella pensó que después de salir una vez verían lo aburrida y rara que es, pero no fue así.
Al momento de abrir la puerta, todos la estaban esperando a unos 3 metros de distancia simulando jugar pelota, ella insegura se fue acercando observando las caras de cada uno. Cuando ya estaba a medio metro de distancia se presentaron todos, eran muchos hombres. Uno a uno fueron diciendo sus nombres. Ella pudo conocer a todos los del condominio, pero hubo alguien, alguien que la dejó sin habla, ese alguien se llamaba Diego, no podía dejar de ver sus hermosos ojos miel verdosos o su hermosa y gran sonrisa, era hermoso, pero mejor decidió dejar de mirarlo y concentrarse en conocer a los demás. Después de que todos se presentaran Danielle se mostró muy tímida, apenas los conocía y ya sentía algo por alguien, no lo podía creer.
Después de pasar un largo día con sus vecinos Danielle se sentía segura de causar una mala impresión para que no la volverían a buscar, pero no fue así. Eran las 9:00 de la mañana y Danielle seguía dormida, cuando de repente escuchó el timbre ¿Quién será?
Era un dia como todos los dia, aburrido y sin emociones, nada interante pasaba, en mi trabajo, era yo esa mesera de cafe☕ solo atendía las ordenes de los clientes, despues de mi trabajo me dirigía a mis clases de baile, porq eso me encantaba hacer bailar y bailar hasta caer rendida pero me alegraba lo que restaba de la tarde, porque llegando a casa llegaba con mamà y papà y mi pequeño hermano Dilan de 7 años, un dia por la mañana me dirigía ala escuela en mi bisicleta, oyendo musica, cuando alo lejos se escuchaba un carro a oda velocidad y con musica muy fuerte, en el carro venían 7 chicos muy lindos por cierto, al rebasarme el carro con los 7 que por cierto hicieron que tambalera y me detuve para equilibrarme, molesta los mire y grite entre dientes, idiotas derrepente centí una mirada, muy penetrante que hiso que piel se erisara era un uno de los chicos del carro, pero no le tome importancia y seguí mi camino, llegando ala escuela vi que el carro estaba estacionado, y dije