«He llegado a un punto de mi vida en donde ya no siento nada. Definitivamente ya no hay dolor, ya no hay miedo, ya no hay nada... La vida me ha quitado millones de cosas, y no sólo la vida, también él. Desde el primer momento en que lo vi supe que mi vida cambiaría, desde que lo vi caí en su encanto, en su oscuridad, y ahora yo me encontraba "en la oscuridad"»