El momento para desahogarse

Estaba tan concentrada mirando el concreto, sólo faltaban algunos minutos para que la biblioteca cerrara. Mi mochila se mecia en mi espalda y escuché que algo cayo de ella pero seguí avanzando sin mirar atrás.
-¡Hey!, espera se te cayó esto.
No quería voltear eso me quitaría tiempo y eso es lo que me faltaba en este precisó momento.
Alguien me tomó del brazo y me asuste e involuntariamente le pise el pie a esa persona como un ataque.
-¡Tranquila!, solo te iba a entregar lo que se te cayo -Dijo levantando sus manos y mostrando en una de ellas un lápiz .
"Así que eso fue lo que se tiró ", pensé.
-Esta bien, muchas gracias, eres un héroe sin capa, como podría agradecerte esta grandísima obra- Dije tratando de sonar sarcástica e irónica.
-Bueno, ya que insistes, hay una cafetería en la otra calle- Dijo inocentemente.
A lo largo de toda mi vida he tenido que lidiar con el hecho de que soy muy mala usando el sarcasmo y la ironía, eso me ha metido en líos... así como este.