Desastre:
Esta palabra resumía todo lo que llevaba de mi vida hasta ahora. Mis padres había decidido meterme en un internado hace dos años, ya llevo cursando la preparatoria, tuve mis dos últimos años de secundaria cuando me metieron a ese internado. Siempre me metía en líos provocando peleas y bromas junto con mi amigo, que no era ni muy cercano ni muy lejano. Nos conocimos este año. Llevábamos una vida un tanto parecida en algunos aspectos: Los dos vivíamos en el mismo departamento, el en frente de mí, nos metieron el mismo año al internado, pero jamas le había hablado, ambos eramos busca problemas, si unos de los dos estaba en un asunto, siempre lo iba a arruinar; eramos imanes para estos; nosotros teníamos padres separados, ellos me querían pero era difícil decir con quien pasar las celebraciones de mí familia. Si una vez pasaba una celebración con mi madre al siguiente año seria con mi padre. En mi cumpleaños los dos pasaban el día conmigo pero si había algún negocio por delante, ninguno pasaba el cumpleaños, ya que era un acuerdo "Si alguno de los dos tiene negocios por atender, no pasare este día con ninguno de los dos" ya llevaba un año que no celebraba ese día, no tenia amigas aquí, solo una pero, como el 27 de enero era aniversario de sus abuelos, tenia que ir esos días a celebrarlo.
Me enviaron para corregir mi comportamiento, pero no podía después de lo sucedido.
Jamas-Me-Comportaría-
Tu y yo tenemos mucha historia por delante.
Próximamente.
Ya estoy hasta la madre de escribir tantas historias sin terminar, pero aquí vamos de nuevo...
Donde un Draco Malfoy tiene autismo, fue abandonado por su madre y se hizo mejor amigo de Harry Potter antes que el trío de oro.
hay una serpiente blanca, un lobo negro y un diario.
Ah, y los fundadores lo ven como la cosa más linda del mundo.