Cuando me alisté en el ejército para realizar el servicio militar sabía que los fans de Super Junior me escribirían algunas cartas. También sabía que no tendría suficiente tiempo para leerlas todas como generalmente sucede, sin embargo me sentía muy solo y durante la primera semana les di una oportunidad. Luego durante dos y tres semanas, hasta que me di cuenta de que eran demasiadas semanas leyendo cartas y menos la soledad que estaba sintiendo. Recibí miles de ellas durante esos dos años, pero 636 eran de una sola persona. 636 cartas de una sola fan. Lo que me contaba en ellas se volvió necesario para mí.