Daniel es un chico de 14 años que ha estado amando a Sheila desde hace 9 años, y nunca ha tenido la valentía de decírselo. ¿Qué debería decirle? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Cómo? ¿Le aceptaría? ¿Le renunciaría...? Estas son preguntas que nos solemos hacer cuando estamos a punto de confesar nuestros sentimientos, y a veces, incluso nos hacemos más preguntas. Este es el caso de Daniel. Pero entonces, se le ocurre una idea... ¿Por qué no mandarle notas anónimas?