Diego es un hombre trajeado muy ajetreado. Tiene repentinos ataques de ira por minucias. Cuentan que fue memorable aquella vez que una máquina expendedora de snacks se tragó una moneda de dos euros, y Diego fue capaz de tumbarla y abrirla a pulso sólo para sacar la bolsa de patatas fritas. Un día su empresa lo mandó como representante para realizar un acuerdo en la India. Fue entonces cuando conoció a Jayappa y a Mantangi.