Lo último que Megan deseaba para este verano era tener que irse a la otra punta del país. Lejos de sus amigos, de su ciudad y de su vida. Su padre se casaría de nuevo con otra mujer ese verano por lo que los obligó a ella y a su hermano a ir a su casa durante dos meses y medio para conocerse y estar presentes en la boda. Lo peor de todo era que tenían que convivir juntos durante todo ese tiempo son su nueva madrastra y el imbécil y arrogante de su hijo, Jake. Era todo lo que una chica como ella quería evitar luego de lo que le había sucedido. Pero al pasar el tiempo descubre que no es tan diferente a Jake. Ambos ocultan secretos y juntos compartirán las mejores noches de su verano.