Toda la vida nos han enseñado la diferencia entre el bien y el mal. De allí, en las profundidades de esos conceptos que al parecer realmente significan algo importante, salieron dos criaturas: Los ángeles y los demonios. Antítesis, opuestos y completamente incompatibles son dos caras de la misma moneda, pues sin uno es imposible que exista el otro. Blanco y negro, bien y mal, luz y oscuridad. Jamás podrán juntarse pues sus propias naturalezas los dividen como seres incompatibles. Pero el primer demonio fue un ángel. En la luz hay oscuridad, y en la oscuridad hay luz. Quizás, y solo quizás ambas especies sean más parecidas de lo que creen. OBRA REGISTRADA Código de registro: 1603256988284