Mírame y sonríe

Nunca pensé que algo así me sucedería. Que alguien como él pudiese enamorarse de alguien como yo. Mi vida estaba descolocada, con solo 19 años tenía un hijo de 4, al que adoraba con todas mis fuerzas a pesar de haber sido fruto de aquello, un trabajo que me asfixiaba y que apenas me ayudaba a pagar mis deudas, y un amigo que intentaba tirar de mi carro cuando no me quedaban fuerzas. Y entonces, le conocí, aquello cambió mi vida para siempre. Y si entonces era un disparate, a partir de ahí se volvió una auténtica locura.