Del Amor Al Encuentro Entre Dos Secretos.

Fue ahí donde se encontraron un lugar entre las matas que parecía de colchón el reparo y el calor de los Juncos secos. Ella exuberante con su torneada figura se deslizaba bella y entregada al amor de aquellos brazos fuertes rústicos de tanto trabajo con tiestos y tierra. Aquel hombre oliendo a rancio y grasa le parecía el más excitante de todos los hombres, más no había conocido a ningún otro contaba con solo catorce años y el un tipo experimentado de veinticinco le robaba los mejores besos de su boca dejando sus labios carnosos rosados abiertos como hermosa flor de camalote ella idiotizados no lograba desviar su mirada de ese rostro de mandíbula cuadrada decidida pero de hondos ojos oscuros y dulces. El lugar era su nido los pastos amarillos acunaban ese amor que era oculto arisco como ellos mismos sin lugar a la razón actuaban y se dejaban arrastrar por la laba ardiente de esa pasión que se sentía mezclada con el olor al polvo de la tierra seca y caliente del verano.