Se llamaba Nada

- "Quiero estar contigo, es tan simple y tan complicado como eso".

Lyvia conoce a Alex, tan perfecto para ella que no parece real. Lyvia teme no poder estar a la altura y decide que Alex merece algo mejor que ella. Sin embargo, la atracción entre los dos complicará sus planes. Los años pasan y la historia entre Lyvia y Alex sólo parece ir a peor: celos, reproches, drogas, violencia... Lyvia está inmersa en un mundo de autodestrucción y Alex tratará de ayudarla. Pero, ¿qué pasa cuando ya has perdido lo único que puede ayudarte?

Las historias no siempre acaban bien. Los caminos se separan, las personas cambian, los errores se suceden uno tras otro, las preguntas no tienen respuesta, los años pasan...y duelen. Alex y Lyvia estaban destinados a estar juntos, pero el destino no se lo pondrá nada fácil. ¿Qué pasa cuando el miedo no te permite ser feliz?