"Ahora vivimos juntos en un paraíso oscuro"
Entre las pocas leyendas y mitos de los humanos hay unos pocos que si son reales, como es el caso de los vampiros. Pero no son como en la televisión los retratan, la manera en la que viven es mucho más compleja de la que alguna película alguna vez podría retratar.
Son seres inmortales que necesitan sangre para sobrevivir y a una compañera, sus almas gemelas para hacer que no se pierdan en la oscuridad que los rodean y la sed de sangre que poseen. Si no dan con ellas finalmente terminan enloqueciendo y volviéndose asesinos indiscriminados, unos renegados, y son quienes aún están cuerdos los encargados de darles caza.
Grace y su familia tuvo la mala suerte de encontrarse con uno de aquellos renegados, un hombre tan cruel que lo único que deseaba era producir miedo y pavor en sus víctimas antes de finalmente robarles la vida.
Y para la suerte de la joven, uno de los cazadores llegó a tiempo para salvar su vida de lo que podía ser el demonio personificado. Pero el destino había preparado algo más para ellos haciendo de Grace el alma gemela de aquel cazador quien no pudo evitar arrastrarla al mundo en el que vivía.
Y nunca la dejaría ir.