Harry acababa de cometer un grave error que cambiaría su vida completamente. Gracias a su enfermedad logró librarse de la cárcel pero debía ser enviado inmediatamente a un manicomio. Louis por otra parte cada día planeaba su escape de ese horrible lugar lleno de enfermos mentales donde vivía hace casi 5 años. Hasta que por la puerta principal vio cruzar a un chico de encantadores ojos verdes que se juntaron con el océano de sus ojos; y desde ese momento, Louis pensó que tal vez podría aguantar un poco más en ese lugar.