Tras intentar dominar Nueva York, Loki es desterrado de Asgard y confinado en Midgard bajo la atenta supervisión de S.H.I.E.L.D y los Vengadores. Además, es castigado con unos brazaletes creados mutando la magia asgardiana y la tecnología de Tony Stark, que bloquean sus poderes. Loki conoce la forma de desactivar los brazaletes, y es la gema Kaaba. Ahora sabe que la gema está en la tierra, y descubre que una mujer la posee. No es una reina, ni una hechicera poderosa, sino una estudiante de medicina normal y corriente... En teoría. No debería ser muy difícil arrebatarle la gema, siendo el Dios del Engaño, ¿verdad? El juego es seducirla para luego destruirla. Lo que Loki no esperaba es que ella también supiera jugar. «El amor es para locos, estúpidos, temerarios... Pero, ¿acaso no soy yo todo eso?