Ella tan segura, decidida y a la vez tan débil, con gustos tan diferentes y a la vez tan comunes, tenía una pasión por el arte de bailar, sin embargo, su personalidad no era nada parecida a la de sus compañeras de baile, ella era fría, solitaria e independiente, aparentemente sin miedos ni debilidades, pero como todo ser humano, existe un talón de Aquiles.
Él tan extrovertido para los que lo conocen, aparentemente seguro y fuerte, bailarín profesional en la escuela secundaria de Pittsburgh, por lo cual él era raro, a pesar de que la gente pensaba que bailar no era un deporte, nadie sabia que bailar era una pasion que tenia cuando era niño, ella llega a su vida de la nada, recordándolo todo, pero sin poder cambiar nada, creyendo simplemente que eran totalmente opuestos.
¿Quién sabe? Quizás hasta pueden encontrarse con la sorpresa más grande de su vida, y recordar un pasado mutuo.
El arte puede ser un deporte dependiendo de como lo apliques, ¿no? sólo tal vez... el fútbol, no es el mejor deporte.
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¡Hola! mi nombre es Desireé, bueno, esta es la primera historia que planeo subir aquí, la verdad, no soy nada nueva en este sitio, y he pensado muchísimas veces en subir una que otra historia pero nada me convencía, hoy a penas entre y me entero que hay un concurso #JustWriteIt y pues... acepte el desafío. Espero en verdad que les guste, apenas estoy empezando hoy y bueno, estaré subiendo capítulos, cada que pueda, obvio antes de los 30 días, (ya que tengo que escribirla antes), aunque tengo una duda, ¿cuándo se acaban los 30 días? Por favor si alguien sabe, avísenme, gracias por tomarte el tiempo de leer hasta aquí y bueno, hasta la próxima. <3
-Des. x :)
Si te dijera que sacrificaras lo que amas para conseguir lo que deseas, ¿lo harías?; si te dijera que las palabras Si y No tienen mas poder del que imaginas ¿lo pensarías dos veces antes de usar alguna de ellas?
Si nos preocupáramos por las consecuencias de cada decisión que tomamos en la vida, no disfrutaríamos ni un segundo de ellas. La vida es incierta, un día tal vez estés en el mejor lugar del mundo y al día siguiente tal vez termines en otro lugar totalmente diferente, no sabrás si amanecerá soleado, o nublado, o simplemente si amanecerás. Gracias a eso, soy fiel creyente de que hay que luchar por tus sueños, sean cuales sean; que debes de complacerte solamente a ti, y es por eso que termine donde estoy hoy en día, siendo una de las mejores bailarinas a nivel mundial, algo que no hubiera logrado sin la ayuda y comprensión de mis amigos y familiares y tampoco sin sacrificios que realmente costaron pero que hoy en día sé que valieron bastante la pena.
Soy Nath, y esta es mi historia.