49 parts Ongoing Cambiarme de país no estaba en mis planes. Tampoco cambiar de idioma, de casa, de rutina... de vida. Pero aquí estoy.
Con el corazón un poco hecho bolsa, el orgullo medio cojeando, y una mochila cargada de cosas que no se ven.
Pensaba que lo peor iba a ser entender las clases en inglés. No tenía idea que lo más difícil sería entenderme a mí misma.
Y luego llegó él.
Con los ojitos más lindos que había visto en mi vida y esa manera de mirarme como si me conociera de antes. Tan agrandado, tan gringo, tan ridículamente guapo... que me daban ganas de empujarlo por las escaleras.
Y después besarlo.
Porque sí, yo venía a sobrevivir. No a enamorarme. Pero ya sabes cómo es la vida.
Le encanta cagarte los planes.