Ella podía tener una actitud fría, distante. Era sarcástica, e inclusive descortés si no le agradabas lo suficiente, pero ¿quién sería ella si no? Jennifer Black siempre fué un misterio para mi, y para calquiera que se atrevía a conocerla. Toda ella era rara. Su forma de vestir, su forma de pensar, de hablar, de ser.
Tenía un don al que todos temían.
Pero justo eso la llevó a ser lo que era, "La Deduccionista", la detective más reconocida, quién me arrastró a aventuras que jamás creí que yo, Henry Moore, viviría.
Y aquí me encuentro, sentado en mi escritorio, recordándola a ella y su aura de misterio con lágrimas en los ojos y la mano temblorosa...
Esta, es la historia de Jennifer Black, "La Deduccionista".