Polette LaCroix vivía junto a su padre en una pequeña casita alejada del pueblo, hasta que un día, su padre la vendió por unas cuantas monedas, al Castillo. Polette tuvo que lidiar con un príncipe demasiado alto de hormonas y ego, con un rey malhumorado y con otro príncipe no tan malo. ¡Ah! No nos olvidemos de Plateu, el Valiente pirata al que conoció en el Greens.All Rights Reserved
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