¿Y si juntamos el ADN de los mejores chicos humanos?
¿Y si los configuramos artificialmente de modo que tengamos ADN con características de chicos literarios?
¿Y si configuramos sus neuronas, como computadoras, para que su personalidad sea la de un chico sacado de un libro?
¿Y si lo programaramos, para que ame a la chica que lo compre?
Eso pensaron las creadoras de BoysBooks, que actualmente, con sus conocimientos de robótica, inteligencia arrificial y genética, han creado lo que la humanidad ha estado esperando... Chicos ficticios, reales. Por solo 40 000 dólares, claro.
Sin embargo, 60% de ellos sigue siendo humano.
¡El 2036 es genial!, ¿No?