Ser padre no es nada fácil, y menos cuando tienes que hacerte cargo sólo tú. Es un trabajo difícil, pero cuando vez a esa pequeña personita dar sus primeros pasos al escuchar su primera palabra, al ver su primer logro y al abrazarla, te das cuenta de que todas las noches en vela valieron la pena, cuando esa pequeña persona te llama "papá" o te dice "te quiero" te das cuenta de que ya es una pieza fundamental para el rompecabezas de tu vida.