Hablando con ella, las cosas que puedo sentir son inexplicables, no sé qué pueda ser, quizá es su forma de hablar o su forma de vivir, o esas malditas ganas de morir, no sé qué pueda ser, solo sé que es.
Es porque es y no deja de ser, y al ser hace que yo sea, exista, no necesariamente sentirme vivo, pero dejo de sentirme muerto, quizá suene falso y algo efímero, pero las cosas que puedan pasar dejaron de preocuparme, deje de pensar en un quizá, o en un que podría pasar, y ahora solo pienso en lo que es, y es lo que es.
Tratar de negar lo que es, solo hace que sea más, y al ser más, me hace ser, no siento que sea por ti, pero sé que es, y no deja, ni dejara de ser lo que es.
Es ella y su forma de hablar, de respirar, de deprimirse, es ella y su forma de ser, y es hasta lo que no podría ser, y entonces, vuelve a ser.
Eres tú, y no es porque yo diga que es, es porque es, y si le buscas una explicación, lo único que conseguirás es que vuelva a ser lo que ya es.
Quizá su forma de sentir y de entender, quizá esas malditas ganas de no seguir, esas malditas ganas de no querer, pero al fin es lo que es, y tu vuelves a ser lo que es.