Renacer de las cenizas nunca fue fácil, mucho menos si esas cenizas fueron provocadas por los ángeles. Penryn sabe que cada situación nueva tiene su proceso, acepta sin peros el hecho de que el mundo esté resurgiendo después del ataque. Lo que no es capaz de aceptar son las decisiones de Raffe. Y que aunque él esté dispuesto a darlo todo por su relación, ella no está muy segura del actuar precipitado que tiene. Es momento de que ambos se enfrenten una realidad de pareja: decisiones, discusiones, la familia, un hogar... estando lejos de los problemas de los ángeles. Pero, ¿cómo se puede estar lejos de los problemas de los ángeles cuando tu novio es uno? Penryn y Raffe deberán aprender a tomar juntos buenos caminos para sus vidas, de lo contrario podrían perderse el uno al otro.