Tres años de haberse conocido. Dos años sabiendo la identidad detrás de la máscara. Él suspiró por quinta vez consecutiva. Ya no sabía qué hacer. Al parecer, todos los sentimientos que tenía dentro de sí no eran suficientes. No para ella. Ella merecía a alguien mucho mejor, sí. Alguien que al parecer, no era él.