La gente suele decir que siempre son las personas opuestas las que se acaban gustando, precisamente porque ven en la otra persona virtudes que ellos mismos no tienen. Aunque, lamentablemente, a veces no es así. Hay ocasiones en las que no importa cuánto lo intentes, simplemente no puede ser porque eso depende del otro. Pero, quién sabe, tal vez con un poco de suerte...All Rights Reserved