No es una historia, o puede que sí. Es parte de mi historia, es una carta que escribí para alguien que nunca la recibirá. El sufrimiento al recordarle, a él y a nuestros momentos. El dolor de saber que no volverá.
Esta es mi historia, o al menos una parte. Aquí relataré que es lo que me llevo a donde estoy ahora. Las decisiones que tome me hicieron lo que soy y no me arrepiento. Estos son los recuerdos de mis mejores días, las tan maravillosas, pero horribles
"Memorias de mi Eternidad".