Crónicas De Un Clérigo Vena Rebelde

Crónicas de un clérigo vena rebelde.
0 - Prefacio.
Nacido en la cuna más prestigiosa de su natal ciudad Constanza, Rumania Vladimir Nell no era más que un joven algo desgarbado malamente visto por parte de su clase social y familia.
Odiaba escuchar la letanía de su madre rogando que agregara más empeño a su vestimenta y porte dada su posición en la jerarquía del pueblo. Este replicaba hacia su progenitora, argumentando que aquel que fuera a acercársele o querer conocerlo sería por su sencilla curiosidad hacia él y no por su aspecto inadecuado.
Su infancia fue colmada de atuendos almidonados, sirvientes hablándole de una manera tan formal y educada que la rutina y prácticamente cada día de su vida le parecía cada vez más insoportable, rodeado de amistades por conveniencia, interés y de su exacto status social. No entendía como no se había suicidado de aburrimiento, desinterés y suficiente monotonía. Asistiendo a colegios de élite, sobre protegido hasta la médula por su omnipotente familia eran raras pero exquisitas las ocasiones cuando podía dedicarse a su mayor pasión; el arte.
Sí, amaba esa expresión de sentimientos, dedicaba noches enteras a la fabricación de pinturas, dibujos y retratos. Era su manera de demostrar lo que jamás podía hablar en voz alta, lo que su familia y asistentes le privaban como a un desgraciado ciego. Para él el arte se resumía a una perspectiva puramente profunda y oculta de sí mismo, algo que salía de tu interior para mostrarlo a la sociedad, pero era un desperdicio puesto que ningún ser que lo rodeaba comprendía lo supremo de aquella disciplina.
Algo inesperado comenzó a pasar en la vida de Vladimir, durante sueños estos se tornaban pesadillas donde aparecían espectros y criaturas mitológicas intentando darle un mensaje que al final con la luz del día se borraba de total coherencia.