10:15 de la mañana en punto, se me había hecho tardísimo, salí corriendo como pude, debía verte a las 10:30 en el parque y no quería hacerte esperar, después de lo mucho que me costó tenerte no quería perderte por algo tan tonto como eso, dicen que el amor a primera vista no existe, quizá sea cierto aunque en mi caso una mirada fue suficiente para que yo moviera el mundo con tal de estar a tu lado.