Un día una chica (de calidad económica muy buena) caminaba por la calle y vio que estaban por atropellar a un hermoso chico sin dudarlo se abalanzó sobre él y lo salvo de su muerte. El chico se presentó y le dijo que le pagaría con un sirviente y que el sirviente sería él mismo. Lo que no sabían es que sus vidas se unirían más de lo esperado.