- Alguien como tú no puede tener idea alguna del amor. - ¿Por qué no? ¿Cómo soy yo? ¿Que es lo que te hace pensar que no soy capaz de sentir amor? -su rostro se acercó un milímetro y su mirada era tan profunda que podría jurar que quedaría grabada en mi mente por siempre.