Sálvame

Bella Ross, una chica delgada, ojos de color azul celeste, cabello castaño, tez clara, muy hermosa; sin embargo, ella no se considera así, se desprecia. Desprecia sus ojos, su color de piel, su cabello, su cuerpo... Se detesta así misma, porque eso le ha hecho creer su padrastro. La insulta, la golpea, la odia.

Su madre se casó con Mark cuando ella tenía 7 años. Su vida estaba llena de alegría, de amor, de cariño.

Pero eso acabó cuando su madre murió de cáncer cuando Bella tenía 12 años de edad. Su vida cambió demasiado, se volvió un infierno. La alegría se convirtió en tristeza, el amor y el cariño se transformaron en odio y rencor.

Su padrastro ha dejado a Bella incomunicada, alejándola de las personas que más aprecia, sus amigos.

Ella desea con ansias de que todos esos horribles sucesos que ha vivido durante cinco años, sean sólo una terrible pesadilla...