Algo muy casual que pasa en la vida de un adolescente, yo siendo lo mas extrovertida en mi secundaria ahora llego a la Universidad siendo algo muy diferente a lo que solía ser, encontré a alguien y así fue... Lo he conocido por redes sociales, me pareció algo interesante el chico, hablamos tarde de la noche, parecíamos muy comunes la verdad que pues me dije "seremos muy buenos amigos" y así fue, cuadramos para vernos, ah y sin contarles que estudiaba en la misma Universidad donde yo lo hacía, así fue, mientas el me esperaba que saliera de clases para conocernos en persona, yo pensaba como "¿y si es muy negro? Bueno solo será un amigo" Salí de clases y allí estaba, esperándome en la puerta principal de la cafetería, me espero con un fuerte y acogedor abrazo y beso en la mejilla donde encontré felicidad y confianza entera, si hablamos harto, incluso nos sentamos fuera de la Universidad, a tomarnos unas cervezas... Hasta eso teníamos en común, nos gusta el alcohol.
Pasaron como 5 días en los que hablamos mucho de nuestras vidas, ah pero al día siguiente de conocerlo me invito a su casa, donde creció, llegue hablamos en fin, me robo un beso que de por cierto fue muy chistoso porque estábamos jugando a la gallina ciega y ahí fue donde me lo robo. Fui al día siguiente y al despedirnos nos besamos, tenía tanta pena que le dije "Olvide ese beso" Así fue...
Arthur Zaens, un multimillonario frío y desalmado que ha vivido en la oscuridad desde la desaparición de su esposa, dejándolo solo con sus dos hijas gemelas. Desesperado por encontrar una niñera que cumpla con sus estrictas expectativas, Arthur conoce a Lía, una ex escritora y editora recomendada por un amigo. Aunque su relación comienza de manera conflictiva, con discusiones y malentendidos desde su primer encuentro en un bar, Lía se convierte en la persona que poco a poco transformará la vida de Arthur y de sus hijas, desafiando su frialdad y cambiando su mundo para siempre.