Cuando nos hablan de algo relacionado con la muerte, nos sorprendemos, especialmente cuando un humano le ayuda en el trabajo. ¿Y por qué no otra perspectiva? ¿No puede ser esto algo bello? La muerte puede ser la mejor cosa del mundo o la peor, todo, depende de nuestra forma de pensar, podemos amarla o podemos odiarla, podemos estar de su lado o podemos evadirla. Slayer es un niño que en su crecimiento despierta el amor por el asesinar, crea una propia filosofía, una propia manera de ver la muerte, el dolor ajeno y los sentimientos; para él la felicidad está en este arte, el asesinar.