Min Yoongi dejó la escuela el día que descubrió que no merecía la pena hacer nada puesto que nada tenía sentido. Los demás nos quedamos. Y a pesar de que el resto se apresuró a borrar toda huella de él, tanto en la clase como en nuestras mentes, algo suyo permaneció en mí. Quizá por eso pasó lo que pasó. ーTodo da igual ーdijo un díaー. Porque todo empieza sólo para acabar. En el mismo instante en que nacen empiezan ya a morir. Y así ocurre con todo. ¡La Tierra tiene cuatro mil seiscientos millones de años, pero ustedes llegarán como máximo a los cien! Existir no merece la pena en absoluto. Todo es un gran teatro que consiste sólo en fingir y en ser el mejor en ello. Hasta entonces no había nada que nos hubiera hecho pensar que Min Yoongi fuera el más inteligente de nosotros, pero de repente nos lo pareció a todos. Porque era él el que había dado con algo revelador. Aunque no nos atreviéramos a reconocerlo. Ni ante nuestros padres ni ante nuestros profesores ni tampoco entre nosotros. Ni tan siquiera en nuestro fuero interno lo reconocíamos. No queríamos vivir en ese mundo que él nos presentaba. Sin embargo, hay personas que sólo necesitan ser salvadas. Y Kim Sooyeon lo descubrirá todo en sólo un verano.