Esta no es la típica historia de la vida de la chica, donde chica conoce chico, se enamoran, chico y chica pelean, chica llora y luego chico decide recuperarla, hace una gran sorpresa, le dice cosas bonitas, y chica perdona a chico y viven felices para siempre comiendo perdices. No, esta no es esa historia y les contare por qué, porque en la vida real, no todas las historias terminan bonito y menos si decides no luchar por aquello que te va a ser feliz. Hola, mi nombre es Marco, tengo 24 años, soy de una ciudad grande al norte del mundo, si sé que no digo mucho pero prefiero dejarlo así. La historia que estoy por contarles sucedió hace aproximadamente 5 años, y ustedes dirán, ¿tanto tiempo? Sí, es mucho tiempo pero para mí parece a penas ayer. Así que aquí vamos.