Una historia tan convencional como extravagante. Tan aburrida como emocionante. Llena de vida y a la vez carente de esta. Algo rara, algo irritante, algo fascinante y a la vez extravagante. Léela, o mejor no lo hagas. No es una historia para todos. Pero no es nada especial. Érase una vez una chica de vestido negro. Érase una vez su historia. -Portada por: MoonEditorial-