Duele abrir los ojos. Es como salir de la oscuridad, que la luz te enceguece. Mejor mirar para otro lado, dicen. Pero para que algo cambie hay que romper la burbuja, hay que salir de la cajita de cristal. Abrir los ojos y animarse a ver, aunque lo que haya para ver nos estruje el corazón.Hoy estoy acá enfrentándome a eso que todos tenemos miedo, los cambios. Los seres humanos, queremos todo tal cual siempre fue, no arriesgamos a saber que pasaría si ese algo ya no fuese como lo conocemos, desde el mas mínimo cambio nos hace temblar las piernas. Y no se si es miedo en verdad, tal vez solo sea inseguridad. Cerramos los ojos, como si eso fuese a volver el tiempo atrás para que todo vuelva a ser como siempre. Yo arriesgue al cambio.Me afecto, me dolió y cerré mil veces los ojos para ver si todo volvía a ser como antes. Soy Isabela, pero quizás a partir de hoy como a alguien mas se le ocurra que me llame. Tengo 16 años y descubrí algo que todos alguna vez dudamos. Si... soy adoptada