Lo fácil y tranquilo que se vive en la indiferencia, la nostalgia y la belleza en la soledad. El triste desinterés en la vida, el pesado vació en la incomprensión. El mundo es demasiado pretencioso así que no hay porque molestarse en buscar la belleza, podría pensar Tsukishima; En la belleza del mundo hay demasiados prejuicios para entregar tu espíritu a alguien mas, quizá siente Yamaguchi. El orgullo y provocación de un aburrido y fuerte chico puede llegar a encontrar algo interesante y agradable en la torpeza y lealtad de un chico que resalta sus pecas cada vez que sonríe. Ves desde lejos lo mágicamente imposible que algunas personas aman a otras personas, que luchan, que gritan, que callan, con sus dientes listos para atacar o en una amable sonrisa, y de repente encuentras a alguien, invisible o imposible, que se convierte en tu vida misma.