--Dilo, vamos, di que me amas.
--Te amo, te amo más que a cualquier cosa, te amo más que a mi vida.
--Y yo a ti preciosa...
A veces las cosas que se viven dejan marcas, a vece las cosas que se viven hacen daño. Nuestra experiencia hizo daño a algunos, pero a nosotros solo nos ayudó a saber que nos amábamos más que a nada en este mundo, y que solo en un millón de años nos podrían separar porque somos el uno para el otro.
Abraham y Maddelyn son hermanos mellizos. Hacen todo juntos, la tarea, la cena, la limpieza, todo. Son muy unidos, y, por ello, su madre y su padre se muestran orgullosos. Ellos también tienen dos hermanos más (también mellizos) Tony y Anabelle: ellos eran los mayores, ya no vivían en la casa, se habían mudado a un apartamento que pagaban entre ambos, pero cada noche iban a cenar la casa de sus padres y a visitar a sus pequeños hermanitos.
Susana y Antonio Mateo: Los padres de Abraham, Maddelyn, Tony y Anabelle, estaban orgullosos de poder decir que sus hijos se llevaban muy bien, demasiado bien para ser hermanos. Pero lo que no sabían era que los dos hijos más grandes del matrimonio: Anabelle y Tony, eran algo más que hermanos, eran algo así como una pareja de novios en secreto, si ¡eran novios! Y pronto, Maddelyn y Abraham también lo serán.