Perrie Edwards es una adolescente de diecinueve años, acostumbrada a la vida de lujos... Fiestas, alcohol, sexo y por supuesto drogas. Jade Thirlwall es una mujer casada con el padre de la mejor amiga de Perrie, Jesy Nelson. Jade sigue creyendo en lo que cree es su heterosexualidad debatiéndose en lo que debería y no debería sentir por la rubia. Simplemente encuentra su cuerpo, sus ojos todo en ella atractivo. Mientras Perrie tratara de llevar sus tácticas de conquista al máximo para hacer que la morena caiga, ella lo sabe, sabe que su atracción es correspondida por mas que la señora Nelson no lo quiera admitir.